¿Quién los ayuda?: los clubes y el deterioro económico

La pandemia, sin lugar a dudas, complica y obliga a esta cuarentena que perjudica al mundo en sus distintas actividades. Las instituciones como los clubes son una plataforma de base para la formación a la que puede llegar una persona. Son los que en estos momentos sufren un momento económico difícil de afrontar. Sus dirigentes seguramente tendrán que ingeniárselas para poder salir de lo que se está viviendo.

Pero también tendrán que buscar en los Entes que los rigen, porque tener inactivos sus predios o instalaciones requiere un sin fin de gastos en el mantenimiento.

Si bien es cierto que los protocolos para volver a la práctica comenzaron a darse, eso va llevar un tiempo en la aplicación y con ello vendrá el ordenamiento o reordenamiento en estas instituciones de bien público, que además no tienen fecha para el inicio de la competencia.

Mediante un relevamiento de Scrum 5 con socios y jugadores de clubes de Tucumán, sacamos conclusiones, que seguramente servirán para un análisis del estado de los clubes de rugby. Tomamos como base los clubes que están afiliados a  la URT. Siempre tomando la referencia de la capacidad de socios por la cantidad de los mismos a lo que hay que sumarles el número de jugadores de las distintas categoría competitivas tanto en los planteles superiores, juveniles, infantiles, agregando el hockey, donde también hubo un pleno desarrollo.

Por ahora no aparecen los entes públicos, que apoyen o al menos cumplan con promesas realizadas». 

Manuel «Sugus» Cardozo, Scrum 5

En lo general, los clubes basan su ingreso en el número de jugadores que suman y a ellos se suman los grupos familiares que no en todos los casos suman un aporte en la cuota societaria, por eso muchos de los clubes, por no decir en su totalidad, tienen adicionales, como ser una cuota deportiva que aportan los jugadores en temporada de competencia. Hay que tener en cuenta que las inscripciones por el año la pagan los jugadores.

En estas nubes de incertidumbres, es evidente que el aporte en lo que respecta a la cuota social sufre una caída que supera cómodamente al 50 %. Teniendo en cuenta la capacidad societaria de cada club, donde hay clubes que todo lo hacen  como se dice a puro pulmón, evitando gastos fijos de empleados. Sin embargo, los profesores de educación física y elementos de trabajos se hacen indispensables para la preparación de los jugadores.

Esto hace pensar que la deserción de players será un duro escollo a superar, que también rondará el 50% y por qué no pensar que esta cifra puede ser mayor, algo que perjudicará en demasía no tan solo en lo económico sino también en la formación de los mismos. Tanto en lo mental como en el ser humano para la incorporación a la sociedad, que con su trabajo de contención saca a los jóvenes de vicios y de malas costumbres.

Por ahora no aparecen los entes públicos, que apoyen o al menos cumplan con promesas realizadas.  Pero sí los distintos dirigentes esperan el apoyo de la entidad madre que es la Unión Argentina de Rugby, gestión que seguramente tendrá mucho que ver la Unión de Rugby de Tucumán.