Pandemia y psicología del jugador: “Va a pegar fuerte”
- Manuel Cardozo
- 13 mayo 2020
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El deporte avanza, el mundo avanza y la ciencia acompaña al deportista para mejorar los rendimientos. La Psicología hoy es una ciencia que tiene buenas influencias en los protagonistas del deporte. El rugby no es la excepción. Y el llamado a la Psicología se potencia ahora, teniendo en cuenta los momentos que se viven con la pandemia por brote del nuevo Coronavirus.
scrumcinco.com conversó con Gonzalo Alonso, ex jugador y psicólogo con especialidad en Psicología del Deporte (MP 2614).
Entre otros temas hablamos sobre el control de la ansiedad y las ganas que tiene el jugador de rugby por entrar a un campo de juego a competir.
“Hoy no estoy activo como jugador por dedicarme a esta profesión, teniendo en cuenta que no dan los tiempos para poder entrenarme. El rugby requiere mucho entrenamiento. Ahora acompaño desde otro lugar”, avisa el profesional, con nostalgia.
¿Cómo va influir la pandemia sobre el jugador?
Va pegar fuerte, porque el deportista tiene que manejar las ansiedades y lo físico hace que el cuerpo, que está habituado a hacer deporte, ahora esté alejado de hacerlo. Ese aislamiento genera muchas situaciones de ansiedad con extremo, que a veces provoca inclusive hasta insomnio, porque la persona no llega a cansarse, se activa de la exigencia física y eso interfiere sus hábitos cotidianos.
Además se complica por los objetivos que el jugador se propone al entrenar y no saber cuándo se va a retomar la práctica deportiva. El mantenerse activo, entrenado y no saber cuándo voy usar todo eso que estoy practicando hace todo muy engorroso si soy jugador.
Es evidente que no es lo mismo tener al jugador en el campo de juego. Hay que tener en cuenta que esto también le sirve al entrenador. Nunca va resultar igual trabajar en la casa que en el campo deportivo, sea tanto en lo individual como en lo grupal, nunca será lo mismo. Más en el rugby, porque lo bueno de este deporte es lo grupal y la identidad del jugador con las Divisiones y con el plantel.
La Psicología actúa sobre los problemas que puede tener el jugador también en lo personal, por momentos el entrenador toma una muy figura paternal. Porque todos los pormenores que se tienen en la vida influyen en el rendimiento, por eso la Psicología influye para que el jugador deje de lado todo eso y se enfoque un ciento por ciento en la práctica del deporte.
¿Cómo ves el lugar de la Psicología en el rugby?
Hoy es algo muy importante, porque siempre se plantea lo físico, lo técnico, lo táctico y por ahí se deja de lado la parte mental. La Psicología es potenciar todas las facultades mentales del jugador para que pueda rendir en su máxima expresión, es decir que pueda tener el máximo rendimiento deportivo. Muchas veces decimos que ha fallado de la cabeza, que no se ha podido concentrar, entonces nos dedicamos a potenciar al jugador para que dé lo mejor de sí.
La parte mental también se entrena y es una parte a la que muchas veces no se la tiene en cuenta.
Entonces hoy ocupa un parte fundamental en la formación del deportista
Sí, yo creo que hoy es fundamental. Pienso que los jugadores que manejan eso son aquellos que hacen la diferencia, porque todos van al gimnasio, todos se preparan en las condiciones físicas, pero yo creo que hoy por hoy la Psicología es clave, en el jugador profesional más que nada. Es lo ´invisible´, como se le llama.
¿Cuáles son los casos más complicados y cuáles son los que se suelen presentar?
Depende mucho del jugador. Lo más complicado de manejar es la parte de la conducción, por ahí muchas inconductas, el no manejar bien las emociones dentro de la cancha.
Hay casos que son de la clínica psicológica, sobre la misión que cumple el jugador desde su rol, para lo cual nos enfocamos en el crecimiento del jugador en el deporte.
¿En qué tendrá que enfocarse la Psicología cuando termine esta pandemia, para lograr un jugador controlado?
Primero y más que nada hay que ubicar bien cuáles son los objetivos del entrenamiento que se están pidiendo o lo que están haciendo en la casa. Porque hoy se hace todo virtual, ya sea en lo técnico como en lo que respecta al físico del jugador. Habrá que focalizar eso que se está haciendo ahora, poniéndose objetivos a corto plazo y otro a mediano plazo, con la incertidumbre es no saber cuándo se va a jugar.
¿Cuál va a ser el cuadro que se puede encontrar?
Seguramente de muchas ansiedades. Los jugadores quieren jugar ya mismo. Tampoco es volver de una. Lo aconsejable es una pretemporada. Es evidente que habrá que manejar de alguna manera la ansiedad de los jugadores y poner paños fríos al regreso, más teniendo en cuenta que el rugby es un deporte de mucho contacto.
Sobre el final de la charla, Gonzalo afirmó que “cualquier deportista puede hacer uso de la Psicología del deporte”. Y aclara: “Lo que hacemos no es tratar un problema sino potenciar al máximo el rendimiento del jugador, no porque el psicólogo vaya a influir para que juegue bien, sino que formamos parte de la evolución y la formación del jugador en su cabeza”.