Gómez Cora: “Los sueños están para cumplirse, las excusas te frenan”
Nuestro compañero Manuel Sugus Cardozo conversó en Scrum 5 Radio con el entrenador de Los Pumas Seven, Santiago Gómez Cora antes de la última gira internacional del año del equipo sensación de la UAR. El objetivo es volverse de Toulouse (12 al 14 de mayo) y Londres (20 y 21 de mayo) con la clasificación asegurada a los Juegos Olímpicos París 2024.
“Es el objetivo más lindo de estos cuatro años, el que nos pone en la gran cita, en la fiesta de gala en donde queremos estar”, se entusiasma Gómez Cora, apasionado y fanático de su trabajo. “No hay que volverse locos. Hay que laburar y ser pacientes”, agrega.
Respecto del presente, analizó que “son pocas veces que se de todo lo planeado, lo pensado, lo soñado, lo imaginado”. “Es un proceso. Estoy hace 10 años al frente del seleccionado. Considero que hubo dos tipos de entrenadores, uno hasta Río 2016 y otro después de esos Juegos. Son, en definitiva, siete años de mucho trabajo, mucho estrés y mucha tensión. Y hoy es disfrute, por haber elegido un buen camino, con cada vez más presión”, remarca.
Para tener un equipo competitivo no te alcanza con un plan de juego y buenos jugadores. Yo siempre hablo de individuos, de que la conexión entre ellos te da un buen grupo y el laburo te arma un equipo. Y los sueños son el objetivo.
Desvelarse para ver a Los Pumas Seven se ha vuelto una costumbre en el último tiempo. “Este presente”, dice el entrenador, “era mi sueño desde que nos planteamos el objetivo inicial”. “Mi idea era generar una identidad para Los Pumas Seven. Hasta gente del mundo del rugby no sabía qué éramos, si Pumitas o Pumas…Hoy se logró, gracias a la medalla de los Juegos Olímpicos de Tokyo 2021. Con laburo, paciencia y perseverancia se pueden lograr muchas cosas. Los sueños están para cumplirse, las excusas son las que te frenan”, enfatiza. Y destaca tener “un gran equipo de trabajo, desde el preparador físico hasta el kinesiólogo pasando por Leo Gravano, que es el único sobreviviente de estos 10 años”.
EMOCIÓN vs RAZÓN
Gómez Cora, abierto como es, nos dejó una muy enriquecedora experiencia, que seguramente merecerá la atención de entrenadores de todos los niveles. Dijo: “Soy muy pasional. Pero trato de absorber mis emociones, antes como capitán del equipo y ahora desde mi rol de entrenador. La emoción siempre le gana a la razón. Sale más rápido. Juegan distinto. Una vez en Río 2016 me dejé llevar por las emociones y me paralicé, entonces no di ninguna indicación interesante que pudiera mejorar al equipo. Cinco años después, en Tokyo, frené y actué con la razón, haciendo un cambio táctico. Dio sus frutos. Entonces, esto es un trabajo interno, mental y físico, muy importante”.
PLAN, PERO NO TAN PLAN
“Muchas veces me piden que les comparta un plan de juego. Yo les digo a mis colegas que no les serviría, porque hay muchas cosas detrás. Para tener un equipo competitivo no te alcanza con un plan de juego y buenos jugadores. Yo siempre hablo de individuos, de que la conexión entre ellos te da un buen grupo y el laburo te arma un equipo. Y los sueños son el objetivo. Hay que laburar y construir, construir y construir…No hay soluciones mágicas. Con los jugadores nunca hablamos de victorias, siempre hablamos de acciones de juego, del scrum, del line, de sacar las pelotas…”
“Siempre es con acciones», agrega. «La forma mía de trabajar no es bajar una línea de un plan de juego sino construirlo todos juntos. Yo sé a dónde quiero llegar. Lo estudié, lo analicé. Pero no quiero llegar e imponer. Al juego lo construimos con los jugadores”, comparte.
PERFILES DE JUGADORES
“Ahora cambió completamente. Antes se elegían a los jugadores rápidos y talentosos. Pero veíamos que el tema era en el contacto, en el uno versus uno, era cuestión de tamaños cuando nos enfrentábamos a Nueva Zelanda, a los fijianos, a los samoanos o a los sudafricanos. Entonces empezamos a buscar jugadores que pudieran empatar a estos tipos en tamaño y con velocidad y a darles herramientas para que sean mejores”, expresa Gómez Cora. Y cierra con un claro mensaje: “Con los jugadores jamás me enojo; el que se enoja pierde”.